Los argumentos que frenaron la baja de la leche

Campo Sureño, Diario Austral (17 sept. 2012)

Durante los últimos meses los productores de leche habían destacado varios elementos que caracterizaban la realidad de la cadena láctea: un mercado local fuerte y precios internacionales y una demanda externa en aumento daban cuenta de cierta estabilidad.

Pero al mismo tiempo había mucha preocupación por el efecto de la sostenida alza de los costos productivos, asociados a los insumos, los alimentos y la energía necesaria para producir leche durante la temporada invernal.

Por eso apenas la empresa láctea Nestlé anunció una baja de 20 pesos en el precio del litro de leche pagado a los productores -que sería válida a contar del 3 de octubre en Los Ángeles, Osorno y Llanquihue-, los agricultores fruncieron el ceño con algo de incredulidad.

Acto seguido, la Federación Nacional de Productores de Leche (Fedeleche) declaraba que se trata de una acción “injustificada e incoherente” que atentaba “con la relación de largo plazo que incluso la misma compañía ha promovido desde el lanzamiento de la nueva fábrica de leche en polvo en Osorno”.

El presidente de Fedeleche , Eduardo Schwerter, aseguraba que lo anterior representaba un “retroceso” en la relación entre Nestlé y sus proveedores, “acentuando la compleja situación que enfrentamos a consecuencia del fuerte aumento de los costos de producción, con una consecuente caída en la rentabilidad del negocio lechero”.

Lo cierto es que no se quedaron de brazos cruzados. A poco andar programaron una reunión de directorio en Santiago para abordar el tema.

En el intertanto recibieron el apoyo de parlamentario de la zona sur, que rechazaban la medida de la industria y pidieron la intervención del gobierno.

En tanto, aprovechando la estadía en la capital, los directivos de Fedeleche se reunieron con el ministro de Agricultura, Luis Mayol. “Tendremos un rol mediador. No estamos en condiciones de ponernos al lado de ninguna de las partes”, indicó el secretario de Estado.

En Santiago también tuvieron una reunión con el presidente ejecutivo de Nestlé en Chile, Fernando del Solar, la que a la postre cambiaría el escenario.

Días después, la empresa transnacional con casa matriz en Suiza, declaraba que dejaría sin efecto la baja anunciada anteriormente.

En un comunicado de cinco puntos reconocía el esfuerzo que han hecho sus productores en realizar importantes inversiones, necesarias para aumentar su producción y garantizar la sustentabilidad del negocio futuro. Y en virtud de aquello y a la difícil situación que enfrentaban como consecuencia de estas inversiones y de los mayores gastos involucrados, echaba pie atrás en su decisión de bajar el precio pagado.

Pese a ello reiteró que la decisión anunciada de modificación de baja de precio obedeció a “factores objetivos en el plano técnico-económico y de competitividad, necesarios para la sustentabilidad de toda la cadena láctea en el largo plazo, como considerar la realidad de todos los mercados a los que se destinan nuestros productos, el bajo precio en el mercado mundial, valor del dólar y la desaceleración registrada en los últimos meses del consumo de leche en el mercado local”.

Y además anunció que implementarán a contar del 3 de octubre, un nuevo esquema de pago que mejorará principalmente los estímulos a la producción de sólidos lácteos y zonificación en función de distintas características productivas.

En este nuevo escenario, los productores celebraron el que consideran un triunfo. Y sobre todo que lograron hacer valer su punto de vista en virtud de los argumentos planteados ante los ejecutivos de la compañía que aparece como el tercer principal comprador de leche fresca en Chile.

A juicio del presidente de Fedeleche, esto ratifica la “solidez de nuestros argumentos, relativos a que el sector no resiste una baja de precios, producto de la situación que enfrenta en este momento, con un fuerte incremento de los costos de producción”.

Pero, ¿qué argumentos mostraron los lecheros a la industria para propiciar el cambio en la pauta de pagos?

Según señala el presidente de Aproval Leche (el gremio lechero de la Región de Los Ríos), Edgardo Zwanzger, el argumento más sólido de los productores fue que pronosticaron el efecto negativo que generaría una señal de este tipo sólo meses después de inaugurar su nuevo centro productivo en Osorno.

En efecto, en aquella oportunidad se formuló un llamado a tener confianza y a producir más leche. De hecho, la empresa señaló que era responsable del 40% de la exportación láctea nacional y su objetivo era llegar al 70%.

Esto hizo, según Zwanzger, que muchos productores tomaran créditos para hacerse cargo de los incrementos productivos. “Con 20 pesos menos tener que pagar los créditos era imposible. Y más aún producir, porque ¿quién produce sin ganar plata?”, agrega.

Desde su perspectiva, los referidos 20 pesos se convertían en definitiva en un punto de no retorno para muchos productores que ante ese escenario hubiesen quedado por debajo del costo de producción.

Algo que reafirma el presidente de Aproleche Araucanía, Rodrigo François, quien explicó a Campo Sureño que hoy los márgenes están muy apretados, sobre todo en la zona de Los Angeles.

“Para esta primavera verano estamos viendo un alza de costos, principalmente por lo que está sucediendo en el hemisferio norte, en Estados Unidos Canadá y Rusia con la producción de granos y una sequía que no ha sido bien dimensionada. En ese sentido, ya se sabe que los costos de producción en la zona de Los Ángeles están a la par de lo que están pagando por el litro de leche”, afirma.

François dice que lo que esperan de la industria es una visión de largo plazo. “El crecimiento de la producción lechera no se hace de un día para otro; son cinco años como mínimo. Los precios obviamente pueden ir variando para arriba o para abajo, pero necesitamos un incentivo a largo plazo para saber a dónde vamos”, explica.

En Osorno, en tanto, la semana pasada se realizó una masiva asamblea de productores lecheros proveedores de Nestlé.

Allí los dirigentes de Aproleche Osorno explicaron la actual situación de los productores con la multinacional tras el abortado plan por rebajar el precio pagado.

Según el presidente de Aproleche Osorno, Dieter Konow, durante la jornada compartieron con los socios los argumentos y acciones que desarrollaron luego del anuncio realizado por Nestlé la semana pasada. “Argumentos que fueron considerados y que condujo a la no implementación de esta medida, dado que pudimos dejar en claro el enorme perjuicio que ocasionaría a productores, que además ponía en riesgo y duda la producción de leche del próximo año”, dice el dirigente.

Konow advierte que están conformes con haber revertido este anuncio a la baja, “pero muy atentos y vigilantes al nuevo esquema de pago anunciado por Nestlé, por lo que llamamos a todos los productores a estar igualmente atentos y vigilantes, de manera que efectivamente la baja en el precio de la leche no se concrete”.

Mientras tanto, el presidente de Fedeleche, Eduardo Schwerter, comenta que el principal planteamiento realizado ante Nestlé fue que la baja anunciada dejaría con números negativos y pérdidas que hace inviable el negocio para gran parte de los productores.

De hecho, en Santiago el dirigente decía que algunos productores sufrirían serias consecuencias con la medida. Y calculó que habría menores ingresos en las economías regionales que llegarían a 5.500 millones de pesos, los que dejarían de circular en el mercado.

Para los productores de la provincia de Bío Bío, la situación ya era complicada antes del anuncio de Nestlé.

Durante su asamblea anual, realizada en agosto, los socios de Aproleche Bío Bío concordaban en la necesidad de un urgente reajuste en el precio pagado debido a los elevados costos que enfrentan.

Ahora, el presidente del gremio en Bío Bío, Juan Pablo Aruta, comentó a La Tribuna de Los Angeles que pese a que el precio no fue reajustado a la baja no pueden estar conformes.

¿Por qué? Según Aruta, porque la situación se mantiene sin cambio alguno. “Hemos sufrido durante muchos años”, señaló.

En su opinión, el cambio estructural en las pautas de pago no generará mejorías de precio significativas que permitan recuperar la competitividad de los productores de Bío Bío, “por lo tanto queda un tema súper importante y pendiente como es sentarse en la mesa a trabajar y cómo y cuánto vamos a subir la leche en Bío Bío para que los lecheros puedan trabajar tranquilos”.

En este sentido, insiste que es necesario revertir esta situación lo antes posible, para que se produzca un alza efectiva a nivel de productor”. “Si bien hay algunos beneficios que se están otorgando, no significan más allá de dos pesos, en cifras, según los cálculos que mostró la empresa”, concluye Aruta.

Para el presidente de Fedeleche, las relaciones quedaron en buen pie, lo que a su juicio puede ser un punto de partida para trabajar en un mecanismo más transparente para la fijación del precio de leche, con parámetros consensuados y objetivos, que aseguren el desarrollo armónico del sector en el largo plazo.

¿Sobrestock?

El presidente de Aproleche Araucanía cree que el argumento del sobrestock primaveral no tiene asidero. “Ellos argumentaron en su momento que va a haber una sobreproducción en primavera, lo que no creemos. Va a aumentar un 3% en relación a la campaña de 2011. Y eso depende de si tenemos una buena primavera y si los costos de nuestros insumos no suben tanto como lo están haciendo”, dice Rodrigo François.

De paso señala que hoy el mercado interno está al alza y firme en cuanto a consumo y precios.

El presidente de Aproval, Edgardo Zwanzger, cree que el sobrestock al que se refiere Nestlé está ligado a temas internos.

De hecho, comenta que en Santiago les dijeron que había fallado un negocio de 8 mil toneladas en el norte de África, lo que habría hecho que el stock de la compañía se disparara ante lo cual optaron por rebajar 20 pesos por litro. “Pero no podíamos aceptar que seamos nosotros quienes nos hagamos cargo de ese tema”, señala el productor de La Unión.

Las últimas cifras de Odepa hablan que la producción a julio de este año ha caído 1% en Chile. Mientras, las importaciones alcanzan su nivel más alto en cuatro años con alzas en leche en polvo entera (98,7%) y queso gouda (109,1%).

El pulso del mercado

Nueva Zelandia es el país que muestra el pulso de los lácteos en el mundo.

En el primer remate de septiembre de la neozelandesa Fonterra, los precios volvieron a subir. Allí el precio promedio de los lácteos se ubicó en US$ 3.174 por tonelada.

La leche en polvo entera presentó un aumento de 4,3% y se ubicó en promedio en US$ 2.978; y la leche en polvo descremada verificó un aumento de 7,5% llegando a un valor promedio de US$ 3.211.

En tanto, el índice de precios de los productos lácteos de la FAO registró un alza de 1,6 % entre julio y agosto y una gran estabilidad desde 2011. “Gran parte de la reciente solidez se deriva de una demanda cada vez más firme unida a limitaciones de la producción en las zonas afectadas por la sequía y por el aumento de los costos de los alimentos”, dice el análisis del organismo.

Lo que pasó con el precio de la leche

Nestlé anunció que reducía en $20 el pago del litro a productor y ardió Troya. Intensas reuniones motivaron que se revirtiera la medida, pero con anuncios de cambios en la pauta de pagos. Ahora está por verse el impacto de esta nueva medida.   

Arnaldo Guerra Martínez. Revista del Campo, El Mercurio (17 sept. 2012)

 En abril pasado, Nestlé remeció el mercado lechero chileno al inaugurar una moderna fábrica de lácteos, con una inversión superior a los US$ 140 millones, para producir 30 mil toneladas anuales. A fines del mismo mes, anunció un bono para premiar con entre tres y seis pesos por litro a quienes aumentaran la entrega de materia prima. 

Pero a comienzos de septiembre provocó un nuevo sismo, del cual aún se sienten réplicas. Claro que ahora el impacto no fue tan positivo como los remezones de principios de año. La empresa -tercera receptora de leche y la primera exportadora- anunció una baja de $ 20 para el litro a sus proveedores, lo que hizo arder Troya. Fedeleche y todas las organizaciones gremiales lecheras regionales pusieron el grito en el cielo. Intensas reuniones entre el lunes 7 y viernes 10 lograron paralizar la medida. La empresa anunció, junto con reiterar su compromiso con el sector y los productores, la decisión de no implementar excepcionalmente la reducción del precio anunciada a contar del 3 de octubre. Eso sí, la lechera precisó que a contar de la misma fecha implementará un nuevo esquema de pagos, que mejoraría los estímulos a la producción de sólidos lácteos y una zonificación según las características productivas. Los lecheros respiraron aliviados, pero se declararon en estado de alerta respecto de la nueva pauta de pagos, a la espera de mayores detalles.
Varias son las réplicas que dejaron las decisiones de la lechera suiza.

Recoger las inquietudes
Los productores en principio plantearon las dudas respecto de que la rebaja pueda venir por el lado de la nueva pauta de pagos. La preocupación radicaba en cuáles serían los cambios, cómo impactarían y qué cantidad de productores podría acceder a los premios que se plantean por la calidad de la materia prima.
La empresa respondió que hace tiempo evaluaban mejorar la pauta de pagos buscando beneficios para ambas partes, y que la situación planteada con el precio apuró la implementación del proyecto.
"Fue presentado oficialmente el 12 de septiembre pasado a los productores, en detalle, y la respuesta fue un agradecimiento unánime, pues claramente visibilizaron los beneficios que esta nueva pauta les significará", señala Marcelo Alonzo, gerente de Estrategia y Política Agropecuaria de Nestlé.
Los cambios más importantes anunciados tienen que ver con pago por mayor nivel de proteína láctea y una nueva forma de zonificación que busca, según la industria, estimular la competitividad de las distintas zonas geográficas donde está presente la compañía.
"La nueva pauta recoge inquietudes de nuestros productores y se conjuga con la visión de la compañía de contar con una leche de mayores sólidos. La baja en los niveles de corte, permitirá que la mayoría de nuestros productores obtengan un estímulo económico por este concepto de proteína láctea, y a su vez, al aumentar el valor hará más interesante esta medida. Estimamos que alrededor del 95% de nuestros productores tendrá un beneficio inmediato económico con ella", dice Alonzo. 
Además, se incorpora un bono al pequeño productor como apoyo para que puedan aumentar la producción.
A los productores la propuesta les parece buena, hasta ahora. 
"Por el momento quedamos tranquilos. La nueva pauta de pagos premia la mayor producción de proteína, se cambia el precio base, pero al final el precio se mantiene en los niveles actuales. Esto ayuda a los productores frente a un escenario de incremento en los costos, que ya venimos viviendo desde hace algunos meses", señala Eduardo Schwerter, presidente de Fedeleche, quien agrega que, aunque hay diferencias entre productores, las variaciones no van a ser muy grandes en lo que reciban.

La solución, como suele ocurrir, no dejó a todos contentos. 
Algunos criticaron que Nestlé hubiera sucumbido a las presiones de los productores. Incluso un Twitter del ministro de Agricultura habló de mediación de esa secretaría de Estado, lo que se señaló se veía como un gobierno influyendo en el precio. Muchos lo consideraron un mal precedente para el sector industrial.
"La determinación del precio de la leche por factores no económicos es una solución de corto plazo que pone en riesgo la estabilidad que todos queremos", indica Alonzo. 
Otro de los remezones en la industria quedó planteado tras las expresiones públicas de los gremios lecheros de felicitación por haber logrado el cambio. 
No se vio bien, expresaron fuentes de la industria, el tema de que los costos de los lecheros se mezcle con el precio que paguen las industrializadoras, que fue uno de los argumentos para dejar sin efecto la medida. 
"Reitero, las variables que influyen en la definición del precio de la leche no consideran la estructura de costos de los productores. Nestlé no ha usado ni usará dicha estructura como un factor objetivo para definir el precio pagado por la leche. Las principales razones que influyen son los factores objetivos señalados, para ser competitivos en los mercados de destino. Sin embargo, en situaciones excepcionales donde nuestros productores han debido enfrentar circunstancias muy difíciles, los hemos escuchado con atención y los hemos apoyado de diversas maneras", dice Alonzo. 

 ¿(Sin)Razones de la baja?

El mismo día de anunciada la baja, industrias como Soprole señalaron que no había razones de mercado para ello. Esto porque si bien los productores lácteos chilenos tienen precios más altos a productor que sus pares de otros países, Chile, por las preferencias arancelarias conseguidas con los TLC -especialmente con Brasil y Colombia, a donde va la mayor parte de las exportaciones de leche en polvo; y con México, donde se envía el queso-, exporta sus lácteos a precios más convenientes que sus competidores,. 
Al respecto, el argumento de Nestlé fue que su estrategia de precios se define en función de su realidad y modelo de negocios.
La obedeció a un riguroso análisis de datos objetivos como el precio internacional, el valor del dólar, la demanda interna, la época del año, condiciones climáticas, etc, indicó.
Se habló también que la baja obedecía a razones internas de la compañía, que envia leche a las otras filiales en el mundo y se queda sin la ventaja arancelaria de los mercados de Sudamérica.
"De ninguna manera. Existen ciertamente mercados, como lo fue antes México, Venezuela, y ahora en parte Brasil y Colombia, que constituyen interesantes oportunidades 'de corto plazo'. Pero existe consenso que el desarrollo lechero sobre esas bases es muy riesgoso para la estabilidad de largo plazo. Por ello Osorno está destinada, además de abastecer el mercado local, a exportar a empresas Nestlé de Centroamérica y Asia. Y no creemos oportuno ni sano, desviarnos de abastecimiento a 'mercados de ocasión', sacrificando la estabilidad de largo plazo", señala el gerente de Estrategia y Política Agropecuaria.

Rematan planta de Mulpulmo

Diario Financiero Online (21 sept. 2012)

Un total del US$ 25 millones (equivalentes a $ 12.500 millones) será el precio mínimo para el remate de la planta Osorno de la fallida empresa láctea Mulpulmo, que se llevará a cabo el próximo miércoles 26 de septiembre.
Se trata de un terreno de 110.000 m2, de los cuales 15.000 m2 están edificados. Así, el remate contempla las torres de secado, la planta de osmosis, laboratorios, líneas de selección y packing, salas de recepción y envasados, sala de calderas y generadores, planta de riles, equipamiento y mobiliario de oficinas, equipo de nanofiltración, además de reffers y cámaras de mantención. 
La licitación será en Abate Molina 77, a las 11 horas.

Fedeleche espera que Mulpulmo quede en manos de empresarios locales

www.radiosago.cl (23 sept. 2012)

Su esperanza en que la Planta Mulpulmo quede en manos de empresarios locales y no de extranjeros, manifestó el Presidente de Fedeleche, Eduardo Schwerter.

A juicio del dirigente gremial, si bien hay optimismo en que la Industria  la adquiera un solvente empresario de nacional, también existe un grado de incertidumbre y preocupación, puesto que las bases elaboradas para la subasta, son abiertas y cualquiera podría adjudicarse la compra. Sin embargo se espera que al corto plazo pueda abrirse de nuevo como una alternativa más para los productores, explicó.

Eduardo Schwerter, destacó además que lo más importante ahora, es que independientemente  quien la compre, se haga cargo a la brevedad para que la ponga en funcionamiento y exista un nuevo poder comprador de leche,  que en cierta manera permite regular el precio del producto.

Finalmente dijo que hoy se abre la posibilidad de proyectar para el futuro la construcción de una empresa local, como lo es Colun en la ciudad de la Unión, que ha dado claros ejemplos de superación, solvencia  y unidad a través de los años.